Retomando el ciclo como de costumbre.

Estúpida, ilusa, inocente, cobarde, creyente, poco normal, hiperactiva, depresiva, entre otros adjetivos fueron los que me calificaron durante estos últimos días. Los primeros tres, más precisamente el día de hoy. Si, eso soy. Una estúpida, que no sabe ni entiende nada. Una ilusa, que se ilusiona con cualquier señal mínima que resultaba no serlo. Una inocente, que cree que puede cambiar algo así porque sí, y que aunque ya le haya pasado algo una y otra vez vuelve a tropezar con la misma piedra, y quién dice contra un paredón, figurativamente.

Estoy cansada de decir que estoy cansada, es agotador escribir siempre lo mismo, y a su vez es imposible que siempre sienta lo mismo. Pero no se otra manera para descargarme, no tengo otros medios. Necesito un psicologo.